Lo que pase en sus delegaciones o las negociaciones del TLC México-Canadá-Estados Unidos es lo de menos; los cuatro aspirantes de Morena a gobernar la CDMX en 2018 andan desatados y violando cuanta ley se les pone enfrente.
Tanto Claudia Sheinbaum como Ricardo Monreal, Martí Batres y ahora el ridículo Mario Delgado se distraen de sus responsabilidades para inundar las redes, los foros y las calles de la capital con propaganda de sus aspiraciones.
Los cuatro estarán integrados a la encuesta que el equipo interno de Andrés Manuel López Obrador hará a partir de la próxima semana a la población abierta para sacar al ganador… o ganadora.
Y está bien que aspiren, pero ninguno de ellos está respetando, al menos, las leyes electorales, que prohíben hacer campañas políticas antes de que la autoridad lo autorice, y se dedican de lleno a promocionarse.
Que se acuerden que, en la capital de Zacatecas, Morena ya fue sancionado con la pérdida del triunfo de Soledad Luévano como alcaldesa por haber incurrido en actos anticipados de campaña, similar a lo que ahora hacen estos cuatro.
Por ejemplo, Monreal y Sheinbaum andan muy distraídos de sus responsabilidades promoviendo sus proyectos a 25 años y la ciencia, respectivamente. Delgado, por su parte, dijo que prefirió ausentarse de las negociaciones del TLC y estar aquí.
Ni allá ni aquí hace falta, como tampoco Martí, quien, como no tiene nada qué hacer, si está en un lugar o no es lo de menos; nada le aporta al país.
Pero tanto Batres como Delgado en realidad no se juegan nada violando la ley con actos anticipados de campaña que les pudiera acarrear alguna sanción, por la sencilla razón de que ninguno de los dos tiene la menor posibilidad de ganar.
De cualquier forma, los morenos se ven muy mal tratando de engañar a la gente inventando la figura de coordinadores estatales, delegacionales y distritales para que hagan campañas en tiempos prohibidos y puedan evitar el peso de la ley. Que no se confíen, pues el caso de Zacatecas fue un buen calambre al tener que ceder el triunfo porque quisieron aplicar esta misma fórmula y les cuadraron el acto anticipado de campaña.
Y mientras todo mundo habla de la contienda interna de Morena, muchos se preguntan dónde anda el PRD, que no sale a dar la cara.
Pareciera que los morenos son dueños de la plaza y que nadie es capaz de ponerles freno. Ni los amarillos, que son gobierno y ganadores históricos de la capital.
¿Qué estarán esperando en el sol azteca para salir a dar un manotazo?
¿Que los morenos se cansen en el camino por arrancar antes de tiempo?
Hasta creen, si de por sí el partido de El Peje trae una ventaja amplia y, aunado a ello, empiezan antes la carrera, a ver quién es el guapo que los alcanza.
Por cierto, en las redes se comenta que el Cristian Vargas anotado en las listas de aspirantes morenos a una diputación por Iztapalapa es homónimo del dipuhooligan, que sigue siendo presidente del PRI en GAM.
Que en lo que sí coinciden es que ninguno de los dos es una perita en dulce, pues el aspirante moreno anotado en el Distrito 21 es un conocido porro que controla a golpeadores del IPN.
CENTAVITOS… Por cierto, está más que claro que los asesores de Sheinbaum le recomendaron venderse como candidata de la ciencia, pues mete el tema con calzador cada que puede, pero también le recomendaron hacerse un cambio de look en el peinado para conectar más en redes. Igual y no, pero se ve mejor.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/adrian-rueda/2017/08/18/1182447
