Connect with us

Capital Político

Las prisas del señor

Published

on

La prisa del Presidente por cambiar a semáforo verde la pandemia y retomar sus giras por el interior de la República tiene más que ver con el desgarriate que trae Morena internamente, lo que obliga al tabasqueño a cargar al partido una vez más.

Aunque ya no es candidato, el inquilino de Palacio Nacional tiene la intención de que sus aliados conserven la mayoría legislativa en la Cámara de Diputados, así como ganar la mayoría de los municipios y gubernaturas que estarán en juego.

Como está claro que los morenos no podrán organizarse por sí solos, pues llevan poco más de un año disputándose el dinero del partido, el Presidente tiene que salir al quite y utilizar su popularidad —por cierto alicaída— para cobijar a sus afines, como lo hizo en 2018.

Aunque ya no sea en las boletas, Andrés Manuel López Obrador quiere seguir apareciendo como el rival a vencer por la oposición, pues ve que del lado de la 4T no hay quien pueda enfrentar a los partidos que hace dos años fueron desplazados del poder.

Y es que, además de la guerra interna de las tribus por controlar Morena, los recientes señalamientos de un presunto desfalco millonario por parte de la exdirigente, Yeidckol Polevnsky, le pega en el corazón de su discurso, que es el combate a la corrupción.

En estos momentos, aunque aún posicionado para dar pelea, el partido que lo llevó al poder tiene la etiqueta de corrupción pintada en sus siglas, cosa que contradice el discurso que todas las mañanas suelta el Presidente en sus conferencias.

Algunos dicen que al tabasqueño no le preocupa mucho el desencuentro que hay al interior de su partido, pues mientras no se pongan de acuerdo, no habrá algún líder sólido con quien compartir la decisión sobre las candidaturas.

Además, de esa forma todo mundo le seguirá debiendo favores, ya que dependerán prácticamente de él, lo cual no le disgusta en absoluto.

Él ya midió las encuestas y aunque sabe que ha perdido mucho del apoyo que obtuvo para ganar la Presidencia de la República, estima que con la fuerza del bloque duro de sus fieles le puede alcanzar para no perder el poder absoluto que hoy ostenta.

Por eso es que no le importa saltarse las trancas y adelantarse a la “nueva normalidad”, que significa salir a la calle y retomar las actividades cotidianas.

En los últimos días ha querido cambiar la narrativa de sus discursos, dejando a cada quien en libertad de cuidarse del covid-19 por sus propios medios y de salir de nuevo, lo que mucha de la población —no la mayoría, por supuesto— agradece.

El reinicio de sus giras por el interior del país coincidió con el arranque del año electoral, previo a la lucha política que definirá, en junio de 2021, si el país sigue por la ruta trazada por su gobierno o vota por un cambio de línea.

Esa es la prisa del señor.

CENTAVITOS

Contra toda ilegalidad y de la manera más rupestre, Morena logró la convocatoria para un periodo extraordinario a realizarse este viernes en Donceles, cuyo tema central será desatarle las manos a Claudia Sheinbaum para que utilice el Presupuesto de la CDMX como le venga en gana, sin informar ni siquiera al Congreso local, que es el órgano que lo aprobó en diciembre pasado. No cabe duda que los morenos necesitan echar mano de todos los recursos públicos para que el próximo año no pierdan la mayoría en Donceles.

Periodista, especializado en política de la CDMX. Editor y columnista

Continue Reading
Advertisement Article ad code

Los influyentes

Twitter

Facebook

Advertisement Post/page sidebar widget area

Recientes